La crianza en brazos consiste en el contacto cercano y permanente con el bebé, ya sea llevándolo en brazos o con un portabebé. Este tipo de crianza tiene múltiples beneficios para el bebé y en base a esto la primera semana de octubre de cada año se celebra Semana Mundial de la Crianza en Brazos, promovida por organización sin fines de lucro llamada Babywearing International (fundada el 2008) con un lema que invita a resaltar esta práctica tradicional a nivel mundial, rescatando la crianza con apego seguro, la necesidad de contacto del bebé y la necesidad de brazos.
La crianza en brazos puede ser llamada como portear, cangurear o exterogestación, y tiene sus detractores quienes la consideran como una manera de malcriar a los pequeños pero lo cierto es que esta práctica tiene cientos de años y trasciende de diferentes culturas como por ejemplo el Mei Tai (llevar sobre los brazos y cinturón o banda) que para las culturas del suroeste de China tiene un significado de honor y de amor.
En este sentido,Blanca García, diplomada en apego y creadora del espacio “Crianza En Flor», asegura que este tipo de crianza es una conducta natural de los seres humanos que ha estado presente en la historia por siglos y que ha permitido mantener a los hijos con vida. “Llevar a tu hijo en brazos es como besarlo. No mides el tiempo, ni el lugar, sólo la necesidad de brindarle lo que necesita en su transición entre el útero y el mundo. Y desde el punto de vista del bebé, mientras más, mejor”, afirma.
La cercanía de los pequeños con sus padres es fundamental en esta etapa, sin embargo algunas creencias y mitos han dificultado la promoción de la práctica del porteo en esta etapa. El portal Chile Crece Contigo enlistó algunos de los mitos más comunes sobre la crianza en brazos:
- Mito: Voy a malcriar a mi hijo teniéndolo todo el tiempo en brazos
Realidad: el porteo favorece a que los niños crezcan más confiados y seguros y no “hijos malcriados” o “cobardes”. El portal afirma que con la crianza en brazos se le permite al bebé «sentir el movimiento y el contacto físico, ayudándole a desarrollar la vista, el olfato, el tacto y la audición». Además desarrolla su confianza porque se siente acompañado, y disminuye sus ganas de llorar ya que se siente contenido fortaleciendo una base emocional segura y estable.
- Mito: los portabebés son peligrosos
Realidad: el portabebé es un método seguro en la medida que el mentón del bebé no le toque el torso y la nariz siempre esté despejada, de tal manera que la guagua pueda respirar en todo momento. Blanca García recomienda elegir un portabebé ergonómico y usar de manera adecuada el portabebé ergonómico. No hay que olvidar leer las instrucciones y asesorarse de forma adecuada.
- Mito: los nudos son complicados de aprender
Realidad: como todo en la vida «la práctica hace al experto». Es posible aprender a hacer los nudos y luego ejecutar con mayor facilidad.
- Mito: portear es incómodo y daña la espalda
Realidad: miles de mamás que practican la crianza en brazos son la prueba de que esto no es cierto. Más que un medio de transporte el portabebé es un método de crianza que fomenta el desarrollo emocional del bebé y permite a la mamá continuar con sus tareas diarias a la vez que atiende a su pequeño. Si existe el dolor de espalda es probable que no se esté usando de manera correcta.
Blanca García, Educadora de Párvulos, Educadora de Disciplina Positiva, Diplomada en Apego Seguro, Postítulo en Dificultades del Aprendizaje y Postítulo en Terapia Natural aportó información valiosa para desarrollar este artículo.